Esta vez he vuelto para expresar el beneplácito, del gozo, el regodeo interior que sentí al leer en La Nazi-ón los rebotes de una nota publicada por la revista neoliberal pirata "The Economist".
Es maravilloso ver como expresan el estupor frente a las pruebas palmarias del éxito económico argentino.
Casi me tiro al piso a reírme cuando atribuían nuestras buenas performances económicas a la fortuna o el azar con la siguiente frase textual: "Los Kirchner han tenido una suerte extraordinaria dado que su período en el poder ha coincidido con un auge de los términos de intercambio para la Argentina"
Es maravilloso comprobar como las críticas que hacen desde estos pasquines cómplices de una de las más formidables crisis financieras de las que se tenga memoria, formulan críticas, que viéndolas desde la peroncha mirada de quién esto suscribe, suena a música angelical.
Hay párrafos sublimes, que me hacen acordar a aquella fábula de Esópo del forro y las uvas. Como me ven que a su libretito de recetas anti-pueblo se los tienen que perder en lo más recóndito del ojete, observan con desdén nuestros éxitos.
Como decía el gran Arturo Jauretche, hay que leer La Nazi-ón para pensar exactamente lo contrario de las doctrinas que publican. En este caso la ecuación también va perfecta para "The Economist" o "Financial Times" y otros panfletos foráneos tan festejados por las corporaciones mediáticas.
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